Por definición “el entrenamiento funcional” significa entrenar con un objetivo o finalidad concreta. Las rutinas de entrenamiento funcional se basan en ejercicios que imitan movimientos que realizamos en nuestra vida cotidiana, de esta forma se obtiene un doble beneficio: Ejercicio para mejorar nuestra forma física y al mismo tiempo garantizar una mejor calidad de vida.
Debemos cuidar nuestra técnica de movimientos para ser eficaces y no perder movilidad en el día a día. Una de las mejores soluciones para ello es enfocar en entrenamiento desde una perspectiva de ejercicios funcional.
¿Por qué debo optar por un entrenamiento funcional?
El ser humano ha ido renunciando paulatinamente a su patrón de actividad diaria, dado que los avances tecnológicos han facilitado todas y cada una de las tareas de supervivencia. Conseguir alimento o desplazarse de un lugar a otro son labores que a día de hoy no requieren ningún esfuerzo físico para nosotros y, aunque pueda parecer una insignificancia, esta facilidad para satisfacer las necesidades básicas nos ha llevado a adoptar un modo de vida en el que prima el sedentarismo. A menudo no somos conscientes de los efectos negativos que esto puede tener en nuestro organismo hasta que no sufrimos una lesión. Es por ello que el concepto de entrenamiento funcional (functional training) ha cobrado mucha más importancia en los últimos años.
VENTAJAS DEL ENTRENAMIENTO FUNCIONAL
Aunque en ocasiones se ha relacionado únicamente con la rehabilitación actualmente son muchos los que respaldan su efectividad y presumen de resultados en el ámbito del rendimiento deportivo. Es por ello que ha pasado a formar parte de los pilares básicos de la metodología de entrenamiento de nuestra compañía, como podrás comprobar en los planes y entrenamientos que te ofrecemos en nuestra plataforma.
¿A qué estás esperando para probar esta forma de entrenarte para tu vida diaria?