Mucha gente desea adelgazar, pero es importante hacerlo desde una conducta alimentaria recomendable y sana.

Los expertos nos dan las pautas:

Alimentos sanos, practica ejercicio y sentido común, para perder kilos pero con cabeza.

Ten en cuenta que si hay algo demostrado a través del tiempo, es que a la hora de perder peso asesorase correctamente por profesionales ayuda a la consecución y mantenimiento del objetivo de forma eficaz, sana y segura. Y no olvides que el éxito de una dieta saludable radica en la alimentación correcta pero también en la práctica de ejercicio físico de manera regular.

Si tu objetivo es perder peso, atento, te vamos a contar cuáles son los principales errores a la hora de comenzar una dieta:

1. Saltarse las comidas, en especial el desayuno
2. Picotear entre horas
3. Seguir dietas no adaptadas a cada persona y no cuidar los aspectos psicológicos de la persona
4. Tomar alimentos que no sacian
5. Optar por dietas milagro que favorecen la pérdida de masa muscular y la recuperación de peso temprana
6. Eliminar los hidratos de carbono de la dieta. Respecto a este tema los expertos recuerdan que los HC no sólo no engordan (su valor calórico es el mismo que el de las proteínas y deben suponer entre el 50-55% del total de calorías de la dieta), sino que si se eliminan de la alimentación se puede, se puede producir una alteración en los neurotransmisores cerebrales y provocar, especialmente al final de la tarde, una crisis que te haga comer de manera compulsiva pan, galletas, golosinas u otros alimentos ricos en Hidratos de Carbono y Grasas.
7. Otro falso mito es la creencia de que la fruta después de comer engorda. Lo cierto es que una fruta aporta las mismas calorías antes y después de comer. Lo que ocurre es que si la tomamos antes de comer producirá un efecto saciante por su alto contenido en fibra.
8. Los productos light e integrales adelgazan. Este es otro falso mito muy extendido. De hecho el consumo de alimentos integrales ha aumentado en los próximos años como consecuencia de la asociación que éstos con reducción de ingesta de calorías.  Si es cierto que aportan más fibra, pero a igualdad de peso, engordan lo mismo que los alimentos refinados. Lo que ocurre es que es recomendable incluirlos en nuestra dieta porque debido a este mayor aporte de fibra se mejora el tránsito intestinal, se reducen los niveles de glucosa y colesterol en sangre y se previene enfermedades como el cáncer. Hay que tener en cuenta, que un alimento light es el que contiene, como mínimo, un 30% menos de calorías respecto al alimento convencional con que se compara. Por eso aunque aporten menos calorías que el producto ‘normal’ con el que los compara no significa que sirvan para adelgazar y muchos deben consumirse con moderación, porque siguen siendo muy calóricos, como la mahonesa por ejemplo o las patatas fritas light.